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Este blog tiene como propósito compartir con mis alumnos y amigos ideas y artículos relacionadas con el mundo de la Religión, la Psicología, la Filosofía y la Educación.

domingo, 5 de febrero de 2012

PARÁBOLA DEL PADRE BUENO


Parábola del padre bueno[1]



“¡Kezazah, kezazah, es lo que me espera!”, pensaba, mientras, desarrapado, maloliente y hambriento, volvía al hogar. Sin embargo, nada detendría su paso. Había caído hondo, pero el amor de su padre le hizo regresar. 

Entre los campesinos del cercano oriente, la kezazah era una ceremonia mortal. Representaba el desprecio del pueblo por aquellos hijos que malgastaban los bienes de la familia. Lo menos que le podría suceder era que después de ser juzgado a las puertas de la comunidad y luego de romper en tierra un gran recipiente, le obligaran a trabajar en alguna aldea cercana hasta devolver toda la hacienda derrochada. Quizás podría ser insultado por el gentío en la calle y desterrado después de una dura golpiza, sin siquiera poder ver a su familia.[2] Ahora, la aldea estaba más cercana y la kezazah amenazaba el destino de este hijo derrochador. En su mente retumbaban las palabras de la Ley de Moisés: "Si alguno tuviere un hijo contumaz y rebelde que no obedeciere a la voz de su padre ni a la voz de su madre... dirán a los ancianos de la ciudad: Este nuestro hijo es contumaz y rebelde, no obedece a nuestra voz; es glotón y borracho. Entonces todos los hombres de su ciudad lo apedrearán y morirá, así quitarás el mal de en medio de ti" (Deuteronomio 21: 18-21) 

Pero, a lo lejos, había un padre que esperaba impaciente. Cuando le vio, fue conmovido y, antes de que la turba lo rodeara, corrió presuroso, le abrazó y le besó frenéticamente, le puso vestiduras de gala, festejó en su honor, rogó a su hermano mayor que le recibiera con el mismo ímpetu y se regocijó profundamente “porque este hijo mío –dijo- estaba muerto y ha revivido; se había perdido y es hallado” (Lucas 15: 24).

El padre de esta parábola es el modelo que Cristo eligió como una representación acertada del amor compasivo de su Padre celestial y de la manera en que recibe a los errantes y arrepentidos.[3] Bien se ha llamado a este relato la parábola del padre bueno. ¿Por qué? Simple, Jesús comenzó diciendo: “Un hombre tenía dos hijos” (v. 11). El padre es, sin lugar a dudas, el personaje central del relato. La parábola “nos dice más acerca del amor del padre que del pecado del hijo”.[4] Representa el sufrimiento, la entrega, la humillación y el deseo de reconciliación de nuestro Padre eterno. Esta parábola es una metáfora de la encarnación.

La partida del hijo rompió el corazón del padre. A cambio de su gran amor y cuidados recibió la amargura del rechazo. El corazón del padre fue quebrantado y, rotas las relaciones, quedó a la espera de la reconciliación. Eso comporta sufrimiento. La ansiedad, el dolor y los desvelos asediaban al amoroso padre y una sombra de tristeza se extendió sobre su casa. Así como este hijo malagradecido, la humanidad ha buscado la felicidad “en el olvido de Dios”[5]. Hemos quebrantado su corazón: “¿No es Efraín hijo precioso para mí? […] Me he acordado de él constantemente”. “En toda angustia de ellos él fue angustiado […] Más ellos fueron rebeldes y entristecieron su Santo Espíritu” (Jeremías 31: 20; Isaías 63: 9, 10).

Cuando ve volver a su hijo, el padre sabe que la kezazah le espera. Sus sentimientos paternos fueron conmovidos y revueltas sus entrañas. Así Dios se conduele del sufrimiento humano. El Señor declara: “A mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé”. “Por un breve momento  te abandoné, pero te recogeré con grandes misericordias. Con un poco de ira escondí mi rostro de ti por un momento, pero con misericordia eterna tendré compasión de ti”. “Mi corazón se conmueve dentro de mí, se inflama toda mi compasión”. “Mis entrañas se conmovieron por él; ciertamente tendré de él misericordia” (Isaías 43: 4; 54: 8; Oseas 11: 8; Jeremías 31: 20). Dios, en su compasión, lleno de piedad y perdón, sale al encuentro de los pródigos que han abandonado el hogar. Afirma el apóstol: “El Señor es muy misericordioso y compasivo” (Santiago 5: 11).

Antes de que el hijo recorriera toda la distancia a casa y cualquiera del pueblo le apuntara con el dedo, antes de que la comunidad le asediara y la kezazah se ejecutara con crueldad, el padre salió corriendo apresurado a encontrarle. Para un hombre de edad y de alta posición social en el oriente medio, correr es un acto inusual, desacostumbrado. Aunque tuviera mucha prisa, se consideraría poco digno.[6] Sin embargo, este padre “reacciona de una manera totalmente contraria a su cultura. Se salta todas las normas del patriarcado oriental”.[7] “No se contuvo en su dignidad […] se apresuró a ir a su encuentro”.[8] Al correr por el camino seguido de sus siervos, de seguro debió sostener su túnica con las manos, descubriendo sus piernas, lo cual se considera también humillante y dolorosamente vergonzoso. El padre asume esta vergüenza y humillación pública por su hijo. Vacía su amor para reconciliarse con él. Abandona su cómodo y seguro hogar para humillarse ante sus siervos y el resto del pueblo que observan asombrados.

El padre no sólo corrió, sino que se echó sobre su cuello y en un largo y tierno abrazo le estrechó contra su corazón y le besó con frenesí, una y otra vez, como lo haría un niño con su padre, expresando honda compasión. Agustín e Ireneo describen al Hijo y al Espíritu como las dos manos del Padre.[9] Finalmente, el padre le cubre con su propio “mejor vestido” (v. 22). “El padre no había de permitir que ningún ojo despreciativo se burlara de la miseria y los harapos de su hijo. Saca de sus propios hombros el amplio y rico manto y cubre la forma exangüe de su hijo […] Lo retiene junto a sí, y lo lleva a la casa”.[10]

No hay kezazah, ya no es necesaria. El padre ya ha sufrido y se ha humillado por el hijo y se ha llevado a cabo la más amplia reconciliación. Los festejos comenzaron. La amargura se transformó en gozo y canción, la separación en reconciliación. Hay más gozo en el cielo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente (Lucas 15: 7, 10).

Aquí tenemos un símbolo del Dios encarnado. A través de la encarnación, Dios participa de nuestro sufrimiento. No es un observador distante. Mientras pensemos en el padre del pródigo, “pensemos en el Padre que se somete a sí mismo al dolor, que no perdona a su propio Hijo, sino que lo entrega gratuitamente por todos nosotros.”[11] Él es quien “se humilló a sí mismo”, quien “siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres”. “Aquel Verbo fue hecho carne y habitó entre nosotros” (Filipenses 2: 6-8; Juan 1: 14). La encarnación dio como resultado la reconciliación: “Vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido cercanos por la sangre de Cristo”. En la muerte del Verbo encarnado, Dios estaba “reconciliando consigo al mundo”, uniendo el cielo con la tierra, “haciendo la paz mediante la sangre de su cruz” (Romanos 5: 9-11; 2 Corintios 5: 18, 19; Efesios 2: 13; Colosenses 1: 20).

“La parábola describe en magnífica sencillez: Así es Dios, tan bueno, tan indulgente, tan lleno de misericordia, tan rebosante de amor”.[12] El amor de Dios aún implora a quienes han escogido separarse de él, y pone en acción influencias para traerlo de vuelta al hogar. No debemos olvidar que somos pecadores atraídos y reconciliados solamente por el amor de nuestro Padre celestial.

Una final invitación: “Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros”. “Al que a mí viene, no le echo fuera” (Santiago 4: 8; Juan 6: 37). “Levantaos e id a vuestro Padre. El os saldrá al encuentro muy lejos. Si dais, arrepentidos, un solo paso hacia él, se apresurará a rodearos con sus brazos de amor infinito […] La gracia de Cristo sale al encuentro de la gracia que está obrando en el alma humana”.[13]




[1] Víctor Jofré Araya (2009), Teólogo Bíblico y Magíster (C) en Educación Religiosa. Actualmente se desempeña como Inspector General en el Colegio Adventista de Arica, Chile.
[2] Kenneth Bailey, El hijo pródigo. Lucas 15 a través de la mirada de campesinos de oriente próximo, p. 62, 78.
[3] Elena G. de White, Palabras de vida del Gran Maestro, p. 156; Manuscrito 132, 1902; Manuscrito 76, 1903; Testimonios para la Iglesia, t. 3, p. 118.
[4] William Barclay le llama la “parábola del Padre Amoroso”. William Barclay, The Gospel of Luke, p. 205.
[5] Elena G. de White, Palabras de vida del Gran Maestro, p. 158.
[6] Joachim Jeremias, Las parábolas de Jesús, p. 160.
[7] Bailey, op. cit., p. 79. cf. John MacArthur, Memorias de dos hijos, pp. 115-136.
[8] Elena G. de White, Testimonios para la Iglesia, t. 3, p. 116.
[9] Agustín de Hipona, Sermón 112A.
[10] Elena G. de White, Palabras de vida del Gran Maestro, p. 160.
[11] ________, Manuscrito 76, 1903.
[12] Jeremias, op. cit., p. 161.
[13] Elena G. de White, Palabras de vida del Gran Maestro, p. 162.

23 comentarios:

sebastian andres dijo...

Este articulo sobre la "Parábola del padre bueno" nos muestra que Dios es nuestro padre es nuestro eje central en nuestra vida que el siempre cuando nos apartamos de el espera con los brazos abierto para recibir a su hijo para entregarle todo el amor que nos tiene.
Esta parábola es muy conocida en los evangelios que en esa época ese caso se veía a diario.

SEBASTIAN DAVID
4M°B

Catalina Galeas Parada dijo...

este articulo de la parabola del padre bueno lo encontre el mejor ejemplo pra recordarnos lo vondadoso y amoroso y misericordioso que es Dios con sus hijos,que apesar de cometer pecado he irse de su casa , vuelven arrepentidos y el los acepta con el corazon abierto dandole su amor y comprencion.

Camila Galeas.
3MºB

Daniel mora dijo...

El Articulo de la "Parábola del padre bueno" Nos dice que Dios es nuestro padre en nuestra vida y que siempre esta en nuestro eje, el siempre nos espero cuando nos a partamos de el pero a pesar de todo nos espera con los brazos abiertos a pesar de todo

Daniel Mora 4M°B

Daniel mora dijo...

El Articulo de la "Parábola del padre bueno" Nos dice que Dios es nuestro padre en nuestra vida y que siempre esta en nuestro eje, el siempre nos espero cuando nos a partamos de el pero a pesar de todo nos espera con los brazos abiertos a pesar de todo

Daniel Mora 4M°B

Daniel mora dijo...

El Articulo de la "Parábola del padre bueno" Nos dice que Dios es nuestro padre en nuestra vida y que siempre esta en nuestro eje, el siempre nos espero cuando nos a partamos de el pero a pesar de todo nos espera con los brazos abiertos a pesar de todo

Daniel Mora 4M°B

Javiera Avalos dijo...

En el articulo la parabola del padre bueno se nos muestra a Dios como un padre amoroso y misericordioso.
me gusta este articulo porque me muestra y me enseña un poco mas de Dios.


JAVIERA AVALOS 4°mA Humanista

Juan Salinas dijo...

A pesar de que ya había leído la parábola, sigo creyendo que Dios es nuestro padre, nuestro timón que nunca nos dejará solos , el nos cuida y nos ama en todo momento.Aunque muchas veces nos alejamos de él, siempre estará ahí para perdonarnos si lo hacemos de corazón.


Juan Salinas
4to B

ClaudioMaturana dijo...

articulo "Parábola del padre bueno" nos quiere decir que Dios es el padre de nuestra vida que sea como uno sea y teniendo la actitud que uno tenga equivocada o no equivocada nos estará esperando con los brazos abiertos sin rencor alguno

Claudio Maturana
4MB
Alexandra Quicaño
4MA

RSM dijo...

Esta parabola nos demuestra el gran amor y misericordia que Dios nos tiene.Si nos alejamos de su lado, Dios siempre estara dispuesto a ayudarnos y a mostrar compasion por sus hijos que alguna vez estuvieron perdidos sin importar el motivo del por que se alejaron.Dios siempre extendera su mano a sus hijos, ya sea tanto en lo bueno como en lo malo.


SM
3°MB

marcelo dijo...

me gusto el articulo porque nos ayuda a comprender la historia del hijo prodigo en la biblia que enrealidad deveria llamarse el padre bueno,porque al fin y al cabo lo importante es como a pesar de todo el padre recibio a su hijo perdido,porque lo que alegro al padre es que su hijo a quien tanto queria al fin regreso.en esta historia Jesus nos quizo explicar como Dios al igual que el padre de esta historia nos espera con los brazos abiertos siempre,y no nos hecha fuera,siempre y cuando vayamos con corazon sincero,reconociendo nuestro error.

Marcelo contreras
3 medio b

Matias Narvaez dijo...

Este articulo lo encontré un verdadero ejemplo del amor de Dios hacia nosotros nos muestra que cuando estamos en las peores condiciones el
siempre nos apoyará , siempre que nos alejemos de el nos esperara con los brazos abiertos

Matias Narvaez
3M°A

maylin andrea dijo...

parabola del Padre Bueno, una enseñanza que podemos tomar con certeza de que Dios es bueno y que su misericordia es sin fin ... creo que podemos reflejarla en nuestra vida cotidiana ya que cada dia cometemos errores pero aun asi Dios esta con nosotros y nos perdona , Dios nunca nos abandona sino trata con nosotros de diferentes maneras ¿quien entendera como?... creo que solamente Dios Padre, la parabola refleja mas el amor del Padre (Dios) que permanece para siempre que el error del hijo hacia el Padre, porque aunque se fue y gasto todos sus bienes y no encontro la felicidad que solamente el Padre puede entregarle, y aun asi cuando volvio al Padre el Padre lo recibio con gran alegria y amor , muchas veces eso no podemos verlo en las personas que nos rodean ya que el orgullo hace que nos cueste perdonar de corazon, y amar o querer como antes, de mucha enseñanza puedo decir que es esta parabola.

Maylin Rojas 3ºMedio B

auradelia dijo...

este tema del padre bueno es muy hermoso ya que nos enseña que Dios nos va estar esperanando con los brazos abiertos siempre a pesar de lo errores que cometimos a cada rato donde muestra que nos ama y que somos sus hijitos queridos

Tzaddi dijo...

Bueno la "parabola del hijo prodigo" es un claro ejemplo de cuan grande es el amor que Dios tiene hacia nosotros muchas veces nos alejamos de El tal como el hijo prodigo pero nuestro Padre siempre no esta esperando con la brazos abiertos y en el momento en que nosotros queramos volver El se alegrara Dios siempre nos dará una oportunidad para volver al El por eso todos podemos llegar a los brazos de nuestro Padre celestial .

Thalia Bazan dijo...

En la "Parábola del Padre Bueno" nos quiere decir que Dios es nuestro padre de vida y que cualquier cosa que hagamos sea buena o mala el nos guiara o nos mostrara el camino del bien. Porque Dios siempre va a estar ahi con nosotros seamos buenos o malas personas, para ayudarnos y nunca dejarnos como hijos que somos.Dios es misericordioso y un padre celestial con un amor infinito .

Thalia Bazán 4° Medio "B"

Anónimo dijo...

el articulo del padre bueno nos enseña que pecados tras pecado podemos arrepentirnos y dios nos recibira con los brazos abiertos y entregarnos todo su amor posible

OMAR GALLEGUILLOS

Ivanna'Alarcon dijo...

Parábola del Padre bueno: Me gusta este Articulo, porque demuestra a Dios como es, bueno, amoroso, y aunque pequemos mucho, el siempre nos esperara, ya que ama al pecador pero aborrece el pecado. muy interesante tema y de mucho agrado.

Ivanna Alarcon 3º medio "A".

Gissel Darling dijo...

me gusto mucho la parábola porque nos dice y nos enseña que Dios siempre estará para nosotros , que a pesar de todo siempre nos esperara con los brazos abiertos para ayudarnos y apoyarnos porque jamas nos abandonara ni nos dejara y sobretodo siempre nos dará su amor , ya que dios es amor. siempre estará con nosotros sus hijos en todo momento sean buenos o malos Dios siempre estará presente.

paula dijo...

La parábola me gusto bastante, ya que nos demuestra que Dios nos ama inmensamente y es capas de perdonar nuestros pecados si nosotros nos arrepentimos de corazón ademas nos enseña que Dios siempre estará con nosotros aunque nos equivoquemos, el nunca nos abandonara siempre estará ahí para guiarnos en nuestras vidas y siempre nos recibirá con lo brazos abiertos.
Paula Portilla 4 medio A

RuthMuñoz dijo...

Este relato nos recuerda el inmenso amor de Dios hacia nosotros, que es un Dios capaz de perdonarnos todos nuestros pecados, un Dios con el cual podremos contar siempre a pesar de que a veces nos alejamos por diferentes motivos de su lado, que a veces cometamos errores olvidándonos de que él nos está observando, él siempre estará allí esperándonos , para darnos abrigo, para curar nuestras heridas y llenarnos de su amor incondicional . Por lo personal esta parábola me llena de mucho gozo y de alegría, es sorprendente como es el amor de un padre hacia un hijo, y también es increíblemente sorprendente como es el amor de Dios hacia nosotros, sus hijos

Atte. Ruth Muñoz 3 medio B

Johanan Varela dijo...

Sin duda es una de las mejores parabolas ilustradas por Jesus ...me imagino como estaria el corazon de Jesus en ese momento cuando el cuenta esa parabola debe haber sentido algo grande en su corazon al estar contando su propia historia.
Dios tiene un gran amor por nosotros que aun fallandolo dia a dia el nos ama por sobre toda las cosas ... y eso hay que aprender a entenderlo y a vivir por ello no a vivir peccando y esperando siempre que Dios me reciba sino a valorar lo que hizo Jesus en la cruz y buscar cada dia ser mejores. esta parabola es increible es una de mis favoritas ... la paciencia del Padre al esperar a su hijo que vuelva es lo mas increible ... y el perdon que le da ...va mas alla de lo que nosotros podamos comprender .
Dios es bueno

Constanza camila dijo...

me gusto este articulo porque nos enseña que dios siempre esta ahi para nosotros , aunque cometamos errores el nos ama y sabe perdonarnos.

constanza lecaros 3 medio A

Unknown dijo...

Este articulo nos deja mucho ya que nos habla del amor que nos tiene Dios a cada uno de nosotros, sus hijos .
también a pesar de todos los errores que cometamos el nos perdonara , siempre y cuando nos arrepentiremos de verdad y de corazón .

Ailyn Lozano
Tercero Medio A